Como amante de la ciencia ficción puedo permitirme y me permito afirmar que esta es una serie de culto, especialmente para anglófilos como yo.
Y es que si además lo combinamos con la pasión de viajar el resultado de la mezcla no es otro que un hombre trajeado surcando el cosmos para hacer cumplir lo que dicta la proclamación de las sombras, el órgano de gobierno intergaláctico.
No estoy hablando de otra serie que no sea el Doctor Who, por muchos conocido y por otros tantos admirado.
Básicamente la serie no trata de otra cosa que lo ya nombrado. Así con todo no pretende tener los mejores efectos especiales o una trama enrevesada que tire del morbo de públicos de todas las edades.
La serie más bien se enfoca en vivir aventuras inimaginables desde un punto de vista cómico, el punto de vista de alguien para el cual las vivencias que se plantean no son tan extrañas, el Doctor.
Así mismo existe un guionista bastante querido por los fans llamado Mofat que le da una gran calidad a cada episodio sin sacarlo de su temática satírica y sin llegar a encasillar a la serie.
Otra cosa buena de la serie es el enorme fandom que posee. ¡Cualquier nerd que se precie debe conocerla y todos sus fans deben poseer un objeto identificador para reconocernos los unos a los otros! Yo por mi parte tengo una camiseta que trato como oro en paño.
Como siempre digo todo aquel que quiera puede animarse a ver un capítulo o dos (puede que al principio te dejen un poco frío porque pretenderás que capítulos de hace más de diez años tengan grandes efectos especiales, pero si aguantas es muy probable que quedes enganchado y descubras cuál es el aquel que nos mantiene a tantos hipnotizados.
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